Con mi cámara retengo detalles de la naturaleza. Me acerco a ellos de tal forma que pierden su relación con el total. Luego los imprimo sobre tela, en grandes formatos.
A través del acercamiento de la cámara y del tamaño final de la obra, se forman nuevas imágenes donde el objeto inicial es difícil de reconocer como tampoco se distingue a simple vista si se trata de pintura o fotografía. La interpretación del espectador cobra así importancia.
Con esto quiero lograr que el espectador ejercite otra forma de acercamiento a la obra.
„Cuando usted sale a pintar, debe olvidar qué objetos tiene delante, un árbol, una casa, un prado, etc. (…) Piense que cada hoja de un árbol es tan importante como el motivo en sí.”
Palabras de Monet a la pintora norteamericana Lila Cabot.
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